Aprendizaje cooperativo - Diseño de situaciones cooperativas

Seguimos adentrándonos en el aprendizaje cooperativo para detenernos, en esta ocasión, en dos aspectos a tener en cuenta al diseñar situaciones cooperativas:

- Determinar el nivel de ayuda que precisará el alumnado para la resolución de cada tarea (equiparable al concepto de "andamiaje" de J. Bruner)
- Crear las tres condiciones básicas para garantizar la cooperación en situaciones de aprendizaje (la denominada "tríada cooperativa" en #CooperaMooc)

Nivel de ayuda o andamiaje

Cuando planificamos tareas es importante prever la ayuda que van a necesitar los alumnos para su resolución para lo cual hemos de determinar, en primer lugar, el grado de dificultad o nivel de desempeño de la tarea en cuestión. El nivel de desempeño y el nivel de ayuda nos darán las pautas para determinar qué forma de trabajo grupal o patrón de cooperación será el más adecuado en cada momento para lograr una cooperación eficiente. Los patrones básicos de cooperación son cuatro y cada uno de ellos está presente en distintas técnicas de trabajo cooperativo, tal y como se recoge en las dos infografías a continuación.

En el patrón 1 los alumnos trabajan todo el tiempo en grupos. En el patrón 2 comienzan trabajando en grupo para terminar haciéndolo individualmente. En el 3 se trabaja de forma individual al principio para terminar colaborando en el grupo y, en el último de los patrones básicos,  el número 4, se trabaja dentro del equipo, pero individualmente y el grupo está ahí, sólo para posibles consultas puntuales. Estos patrones -cuyo fin último es "que los alumnos aprendan juntos a trabajar solos"- subyacen a distintas técnicas cooperativas como se recoge en los ejemplos a continuación.

Tres condiciones básicas para una cooperación efectiva: la tríada cooperativa

Las tres condiciones básicas para garantizar la eficacia del trabajo cooperativo son:

1. La interdependencia positiva

2. La participación equitativa

3. La responsabilidad individual

Para comprobar si hemos diseñado tareas cooperativas de acuerdo con estas tres condiciones básicas podemos formularnos las siguientes preguntas:

1. ¿Se necesitan los alumnos unos a otros para resolver la tarea? (interdependencia positiva)

2. ¿Va a poder participar todo el mundo en la resolución de la tarea? (participación equitativa)

3. ¿Seremos capaces como docentes de comprobar el desempeño individual de los miembros de los equipos? (responsabilidad individual)

Si la respuesta a estas preguntas es afirmativa existirá una garantía con respecto a la eficacia del trabajo cooperativo. Pero, ¿cómo diseñar actividades que lo garanticen? Pues bien, para cada uno de los casos existen técnicas que nos ayudan en esta tarea, algunas de las cuales he recogido en la infografía a continuación.

De todo ello se concluye que un buen diseño de las situaciones de aprendizaje es decisivo para garantizar la cooperación. En el siguiente post presento una tarea cooperativa concreta a modo de ejemplo de lo explicado en esta entrada.